Entrevistamos a Manuel Blanco, responsable del departamento técnico de Opencel

Su sector es uno de los de mayor crecimiento en España, ¿cuál cree que es la razón?

A pesar de la situación de crisis, la estética es un sector que nunca decrece. Tanto hombres como mujeres quieren sentirse guapos y bien consigo mismos, por eso un alto porcentaje de la población considera inevitables los gastos en gimnasios o tratamientos de belleza.

Por este motivo el sector sigue creciendo y siguen abriendo centros de estética, el secreto de Opencel es destacar entre todos esos competidores gracias a una oferta sin competencia.

¿Cómo Opencel marca la diferencia respecto a otras franquicias de salud y estética?

Opencel es diferente al resto de franquicias independientemente del sector que sean. El concepto habitual de franquicia consiste en trabajar con un modelo de negocio que previamente has pagado. Entra cánones de entrada, costes de formación y trámites, etc, la central franquiciadora se asegura beneficios sólo con la apertura. Nuestro modelo es totalmente diferente, invertimos nuestro dinero en cada una de las aperturas y lo recuperamos trabajando codo con codo con el franquiciado.

En lo referente al cliente final, Opencel se diferencia del resto de competidores gracias a su oferta. Combinamos 5 tratamientos de estética en una misma sesión y por un precio de 30€, eso no lo ofrece nadie en el mercado. Además disponemos del tratamiento de blanqueamiento dental más económico y eficaz.

Actualmente, ¿en qué puntos de España se encuentran?

Entre los centros ya abiertos y las próximas aperturas programadas, estamos prácticamente en todas las provincias de España. Evidentemente aún quedan zonas disponibles y la expansión continúa viento en popa. Ya estamos en 3 países y estamos estudiando la posibilidad de abrirnos a nuevas fronteras para 2016.

¿Por qué Opencel ofrece tantas facilidades económicas al franquiciado?

Porque somos realistas. En Opencel hemos conseguido adaptarnos a la situación económica y social que vivimos actualmente en nuestro país. El antiguo modelo de franquicia que exige una fuerte inversión inicial para empezar a trabajar ya no tiene sentido. Hay cientos de emprendedores que tienen las ganas y la capacidad de sacar adelante su propio negocio pero no tienen liquidez para realizar la inversión que supone. Desde Opencel queremos ayudar a esas personas a que puedan cumplir su sueño y abrir su propio centro sin necesidad de gastar sus ahorros o solicitar préstamos bancarios.

Sabemos que el modelo funciona y por eso podemos permitirnos realizar la inversión desde la central. Además, desde hace unos meses también damos los dos primeros meses de carencia para poner las cosas aún más fáciles.

¿Podría hacer un breve balance de este año que termina?

Ha vuelto a ser un año de crecimiento. El modelo de negocio está ya muy asentado en España y Portugal y al final del año hemos puesto la guinda con nuestra primera apertura en Andorra.

¿Cuáles son las claves de su plan estratégico para 2016?

En 2016 queremos seguir ayudando a los nuevos emprendedores a crear su propio negocio de la manera más rentable y sencilla. Nuestro modelo sirve tanto para el inversor que quiere hacer negocio, como para el desempleado que busca la solución en el autoempleo.

Barajamos ya cientos de solicitudes de personas interesadas en abrir en otros países, de modo que otro de los planes para este próximo año es estudiar las posibilidades de expansión a nuevas fronteras.

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