Mi gran reto es hacer que haya una flor Kids&Us en todos los lugares del mundo donde haya niños y niñas con inquietud y ganas de aprender una nueva lengua
El inglés es su gran pasión y ha sabido convertirlo en su forma de vida a través de la enseñanza. Con tan sólo 23 años, Natalia Perarnau, licenciada en filología inglesa por la Universidad de Barcelona inauguró su primera escuela de inglés en Manresa con muchas ganas e ilusión. Esta primera academia tenía el nombre de English Study Centre pero lo que Natalia no sabía en esos momentos era que, esa academia iba a ser el germen de una gran cadena de escuelas de inglés con gran éxito: Kids&Us.
En un principio, la academia que inauguró Natalia Perarnau estaba dirigida a un público adulto y adolescente. Es sabido por todos que, históricamente, España siempre ha sido uno de los países con peor nivel de inglés en Europa y por este motivo, la emprendedora catalana quiso contribuir a que esta estadística cambiara. ¿Cómo? Salir del procedimiento habitual y comenzar por los cimientos.
En esta primera academia Perarnau ya observaba que con el método tradicional no alcanzaba sus objetivos y los alumnos no dominaban el idioma perfectamente. Tras ser madre, en el año 2000, esta emprendedora cuya pasión es el inglés, decide ampliar su academia con un área enfocada en la enseñanza de este idioma para niños a partir de los 3 años, un área Kids. Paralelamente, decidió hablar durante 10 minutos en ingles a su hija todos los días, y al cabo de pocos años descubrió cómo su hija entendía el idioma y era capaz de construir frases sencillas mucho mejor que sus alumnos de toda la vida. “Cuando dirigía mi propia academia de inglés en Manresa, para a adolescentes y jóvenes, veía como con el método tradicional, a pesar de estudiar inglés durante muchos años, mis alumnos no conseguían dominar el idioma a la perfección. Simultáneamente a ese momento, nació mi hija Laia y decidí hablarla en inglés durante diez minutos cada día. Para mi sorpresa, al cabo de unos años, Laia podía entender e, incluso, construir estructuras sencillas en inglés”. Así me lo cuenta Natàlia. Fue esta experiencia la que le llevó a acercase a la creación de una metodología propia y a reorientar su escuela de inglés y dirigirse a un público mucho más joven. Empezó a probar el método Kids&us English for Little People en su propia academia con sus alumnos, y empezó a observar grandes resultados. Tres años más tarde, en 2003 nació Kids&Us.
Tras varios años testando e implementando su propio método en la escuela de Manresa, la fundadora de Kids&Us quería ampliar su radio de acción en Cataluña y que su método llegara a cuantos más alumnos mejor. Así, esta academia de inglés empezó su expansión a través de licencias en 2005. Esto permitiría también a Natalia Perarnau disponer de más recursos para seguir desarrollándose, asegurar la calidad de sus escuelas y seguir creciendo. Sólo dos años más tarde, en 2007, Kids&Us se convertía en franquicia.
En el año 2007, y con la incorporación de su marido Quim Serracanta como director general de la compañía, Kids&Us empezó a abrir centros franquiciados. Doce años después Natalia Perarnau ha conseguido abrir 435 centros. Franquicias que se encuentran, no sólo en España, sino que han cruzado de nuestras fronteras, llegando a Andorra, Italia, Bélgica, República Checa, México, Marruecos y Japón. Todos ellos proporcionan enseñanza en inglés a más de 115.000 niños y niñas. Resulta extraño no toparse con una escuela Kids&Us en todos los barrios.
“Está claro que el modelo de franquicia en nuestro caso, es el que permitía hacer el método escalable y reproducible, puesto que quien decide apostar por una franquicia lo hace sabiendo que está comprando un “know-how” y unos procesos que aseguran la calidad y los resultados. Para mí la franquicia ha sido la forma de poner mi metodología al alcance de más niños sin que ello supusiera comprometer la calidad” asegura la fundadora de Kids&Us.
Al abrir su primera franquicia, Natalia comenta que sintió una gran ilusión. Para ella era muy importante porque significaba que alguien valoraba tanto su trabajo, como para hacer de él su forma de vida. Lo vivió con ilusión, pero también con vértigo y responsabilidad.
Pero no todo fue un camino de rosas. La fundadora de Kids&Us tuvo que trabajar mucho para llegar a la situación actual y tuvo momentos duros en los inicios de la expansión en franquicia. Justo al empezar la crisis económica, Natalia Perarnau decidió vender unos locales y financiar así una escuela de Kids&Us que se iba a convertir en el Flagship de la academia. Pero la crisis inmobiliaria hizo que el comprador se echase atrás. La empresaria se encontró con que había comprado un local nuevo, había hecho todas las obras pero se quedó compuesta y sin franquiciado. Esto sucedió, según nos cuenta Natalia en una amena conversación, un mes de junio. Además de la gran inversión que tuvo que realizar, su marido había dejado el trabajo para centrarse en el proyecto de Kids&Us. Pero lejos de achantarse ante la situación, y como la necesidad agudiza el ingenio, Perarnau empezó a organizar actividades para aumentar sus ingresos y de ahí, surgió un nuevo plan, campamentos de verano Kids&Us. Además de profesora de inglés, Natalia apuntaba maneras en lo que a ideas emprendedoras y de negocios se trataba.
Aunque fueron momentos duros, la creadora de esta escuela de idiomas lo recuerda con cierta ternura, pensando que de una situación mala puede nacer algo bueno.
Al principio era ella misma quien se reunía con los posibles franquiciados. Recuerda aquellos momentos y me cuenta que “las primeras reuniones eran muy largas, de tres o cuatro horas, puesto que cuando el proyecto no era tan conocido, los interesados querían y necesitaban conocerlo bien y, a nosotros también. Siempre viajábamos hasta donde estaba el interesado y podíamos reunirnos en un hotel, en una cafetería o en el domicilio del potencial franquiciado. Recuerdo que tomábamos vuelos muy temprano y regresábamos muy tarde”. Primero contactaba con academias de inglés que ya existían. Les enviaba una tarjeta tipo postal que, ella misma apostilla, nunca les dejaba indiferentes. Con el tiempo, muchos de los interesados llamaban directamente a Kids&Us por la publicidad que hacían en diversos medios importantes y de gran repercusión. Incluso algunos padres de sus alumnos se han convertido en franquiciados o están en proceso.
Ahora, pasada más de una década, son más de 100 profesionales los que dan servicio y apoyo a la red de franquicias Kids&Us, cuyos franquiciados deben ser personas emprendedoras a las que les apasione trabajar con niños y por supuesto, la enseñanza.
Lo que empezó Natalia Perarnau como una academia única en Manresa se ha convertido en una red de centros con una amplia estructura de negocio.
Cuando se le pregunta por sus retos indica que no tiene límites ni fronteras. “Mi gran reto es hacer que haya una flor Kids&Us en todos los lugares del mundo donde haya niños y niñas con inquietud y ganas de aprender una nueva lengua. Además, quiero seguir ofreciendo a todos nuestros alumnos un método eficaz y cada vez mejor, para que en el futuro el inglés sea para ellos una herramienta que les abra muchas puertas para lograr sus objetivos”.
El método que implantó y desarrolló la fundadora de Kids&Us se basa en el aprendizaje a través de la adquisición del lenguaje de forma natural, el mismo que se utiliza para aprender la lengua materna. Es por ello, que Kids&Us ofrece actualmente clases de inglés para bebés a partir de 1 año.
Desde Kids&Us lo definen como un método natural y espontáneo siguiendo un orden determinado.
Los bebes nacen con los circuitos del lenguaje desconectados y a través de la estimulación se van conectando. Este proceso de los primeros años de vida es el que quiere aprovechar Natalia Perarnau para enseñar inglés a los más pequeños. De esta forma, se asimila el nuevo idioma del mismo modo que se aprende la lengua materna.
Kids&Us ofrece clases de inglés a alumnos a partir de un año y hasta los 18 años. Y lo hace en grupos reducidos, máximo de cinco estudiantes en las clases de babies y, hasta ocho escolares en otros cursos.
Dentro del proceso natural de aprendizaje las diferentes etapas que debe aprender el alumno son listening, understanding, speaking, reading, y writting, es decir, escuchar, comprender, hablar, leer y escribir, en ese orden. El proceso de adquisición de la nueva lengua se inicia con la escucha en el nuevo idioma, ya que el lenguaje se adquiere antes de saber hablar. De esta forma, se enseña primero a asimilar el idioma desde el primer año, exponiendo al bebé a la nueva lengua de forma diaria. La siguiente etapa es la comprensión. El niño comienza a comprender lo que escucha después de oír las mismas combinaciones en diferentes contextos y entiende el significado. A continuación, el alumno se inicia en la fase de hablar, en la que comienza a verbalizar todo lo que aprende. Después de formarse en hablar, viene la etapa de aprender a leer y finalmente, la etapa de la escritura y de expresar los pensamientos sobre el papel.
En 2017 la firma de capital riesgo Corpfin adquirió la mayor parte de Kids&Us. El objetivo de dar un nuevo impulso a la expansión nacional e internacional de la cadena, con varios ejes de actuación. Por un lado, el crecimiento en el territorio nacional, por otro lado, el afianzamiento internacional en los países donde ya está y por último la entrada en nuevos mercados fuera de España. Corpfin aporta sus recursos y también su experiencia en la gestión empresarial.
Con esta operación, la fundadora y filóloga Natàlia Perarnau y el economista Quim Serracanta sólo contarán con una participación minoritaria, pero continuarán al frente del negocio en su nueva etapa. Seguirán siendo los referentes del proyecto.
Para que se materializara el acuerdo, Kids&Us ha valorado fundamentalmente, que el nuevo socio respaldara su filosofía y su proyecto empresarial basado en la alta calidad de su enseñanza y en la innovación constante.
Actualmente, cuentan con 115.000 alumnos y su objetivo es alcanzar los 200.000 en el año 2020. En 15 años, Kids&Us ha conseguido abrir 435 centros y su plan de expansión consiste en sumar 200 nuevos centros más y entrar en nuevos mercados internacionales y emergentes en Europa, Latinoamérica y Asia. En términos económicos, las franquicias que operan bajo el paraguas de la marca Kids&Us generan una facturación conjunta superior a los 84 millones de euros y dan empleo a cerca de 3.000 profesionales.
Mirando hacia atrás, Natàlia Perarnau hace un balance muy positivo de todo lo que ha conseguido porque asegura, “todo ha salido muy bien”. El precio personal y familiar ha sido alto pues, me dice Natalia, es muy sacrificado y se produce mucho desgaste. Pero también reconoce que nunca imaginó haber llegado hasta donde está.
Esta es la historia de una empresa creada hace 15 años, por una mujer emprendedora que tal y como recoge en su blog, lucha cada día para conciliar sus tres papeles en la vida; el de mujer, madre y profesional. Para Natalia Perarnau aprender es una actitud y espera no dejar de aprender nunca. Su visión fue crear un método de enseñanza imitando el modelo en que se aprende la lengua materna. Natalia se describe como una persona con pasión, cordura y locura, reflexiva y racional. Asegura que “la pasión ha gobernado mi vida profesional, y la cordura y el sentido común, mi vida personal”.
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