Desde 1984, apostamos por ofrecer en su concepto de restauración pastas y pizzas de elaboración propia, inspiradas en la fusión de la cocina italiana y argentina.
Esta singular mezcla cultural surge de la emigración italiana a Argentina en el siglo XX, lo que ha dado como resultado una propuesta culinaria única en el sector de las franquicias de comida italiana en España.
Nuestra historia comienza en la plaza de María Pita, A Coruña, como un restaurante familiar que introdujo a la ciudad herculina a un nuevo concepto de cocina italo-argentina, con productos frescos y elaborados de manera artesanal.
Hoy, más de tres décadas después, hemos evolucionado para convertirnos en una cadena de franquicias de restauración consolidada, con una creciente proyección a nivel nacional.
Nuestro modelo de negocio se basa en la autenticidad de todas nuestras recetas y en nuestra capacidad de adaptación a las tendencias del mercado.
Con la premisa de ofrecer siempre productos de calidad, hemos mantenido nuestra propuesta artesanal desde sus inicios.
Cada plato, ya sea una pizza o una pasta, se elabora diariamente con ingredientes frescos en nuestro propio obrador.
Además de la propuesta gastronómica, hemos apostado por combinar tres líneas de negocio: restaurante, servicio a domicilio y take-away, lo que proporciona diversificación de ingresos y asegura una sólida facturación durante todo el año.
Reconocidos por nuestro compromiso con el cliente, también hemos innovado con servicios como la entrega a domicilio y un amplio menú que incluye no solo pizzas y pastas, sino también ensaladas, carnes, pescados y postres caseros.
Elegir Cambalache como franquicia de restaurantes italianos ofrece numerosas ventajas que hacen que el modelo de negocio sea muy atractivo para los futuros franquiciados:
El perfil del franquiciado de Cambalache es aquel que comparte la pasión por la gastronomía y está comprometido con ofrecer siempre la mejor calidad.
Aunque la experiencia previa en restauración no es un requisito indispensable, el candidato debe estar dispuesto a mantener los altos estándares de la marca y comprometerse plenamente con la calidad del servicio.
Además, el candidato debe tener habilidades de liderazgo para gestionar y motivar a su equipo, con el fin de asegurar el éxito del restaurante.
La gestión eficiente de operaciones y el compromiso con la satisfacción del cliente son claves para abrir una franquicia Cambalache.