Popeyes ha dado un paso decisivo en su consolidación en Madrid con la inauguración de su nuevo restaurante en una de las ubicaciones más estratégicas de la ciudad, la Calle Alcalá número 4, ubicada a escasos metros de la icónica Puerta del Sol.
Este nuevo establecimiento no solo eleva el número total de locales en Madrid a más de 40, sino que también se establece como el restaurante estrella de la marca en la capital.
Popeyes, un Símbolo de crecimiento y compromiso en el sector del pollo frito
El nuevo local de la franquicia Popeyes ha requerido una inversión considerable en renovación y modernización, convirtiéndose en la insignia de la marca en Madrid y llegando en un momento de auge para la
franquicia de comida rápida, que ha visto cómo más de 11 millones de personas en la capital han disfrutado de sus productos desde su llegada hace casi cinco años.
Ignacio Sedano, director general de Popeyes Iberia, expresó su entusiasmo durante la inauguración: "Estamos encantados de abrir las puertas de este nuevo establecimiento en el corazón de Madrid. Desde nuestra llegada a la capital, hemos experimentado un crecimiento excepcional. Esta nueva apertura es un reflejo de nuestro compromiso continuo con la comunidad madrileña y nuestro empeño en ofrecer una experiencia gastronómica sin igual".
Además de enriquecer la oferta gastronómica de la ciudad, el nuevo restaurante de la cadena de pollo frito tendrá un impacto positivo en la economía local con la creación de más de 30 nuevos puestos de trabajo, sumándose a los más de 1,300 empleos que la marca ya ha generado en Madrid.
Con este nuevo buque insignia, la franquicia no solo aumenta su número de locales en la capital a 41, sino que alcanza un total de
126 establecimientos por toda España, reafirmando su papel como actor clave en el
sector de la restauración.