Los dos últimos locales en sumarse a los 200 actualmente repartidos por toda España se sitúan en Madrid y Barcelona. El primero, en el emblemático Barrio de Malasaña, concretamente en la calle Manuela Malasaña, 3. Este nuevo Lizarran cuenta con 155 m2, y se sitúa en una de las zonas más importantes para el ocio de la capital.
El segundo se localiza en la transitada Avenida de Gaudí de Barcelona, concretamente en los números 5 y 7. Se trata de uno de los Lizarran más grandes de toda la red, con 160 m2 más un altillo de 70.
Estas aperturas vuelven a confirmar el buen momento de una enseña que crece tanto en España como en el extranjero, donde se encuentra ya en una veintena de países. Un ritmo que permitirá cumplir el objetivo para todo el año, y la creación de 1.000 puestos de trabajo antes de final de 2013. Un crecimiento para el que herramientas como el Plan Renove (que permite abrir un Lizarran a quien disponga de local desde 50.000€) o el Proyecto Bares (para convertir un bar ya en funcionamiento en un Lizarran desde sólo 19.000€) han demostrado su eficacia.